Deportes | 03-10-2010

El DT de Boca presentó la renuncia aunque no quiso confirmarla

Claudio Borghi presentó la renuncia al cargo de entrenador de Boca, algo que no quiso confirmar en la conferencia de prensa que brindó luego de la derrota ante Lanús. "Me cuesta seguir", sentenció. El martes la práctica la dirigirá "Tito" Pompei, según le confirmaron fuentes de la entidad de la ribera.

"Quiero destacar que he encontrado una buena calidad de gente. No quiero hacerle daño a nadie, ni a jugadores ni dirigentes. Me cuesta seguir pero vamos a esperar un día para tomar decisiones", señaló Borghi en conferencia de prensa.



Sin embargo, horas después se confirmó que Borghi presentó la renuncia, que se tomará un día para hacerla oficial por pedido de la dirigencia de Boca, aunque ya se suspendió el entrenamiento de mañana que iban a realizar algunos jugadores, entre ellos Juan Román Riquelme, y le avisaron a Pompei que el martes se tiene que presentar en Casa Amarilla.



Luego del partido, según le confirmaron a Télam allegados al plantel xeneize, Borghi tomó la decisión de renunciar y se lo comunicó al presidente del club, Jorge Amor Ameal.



Ameal enseguida se puso en contacto con Martín Palermo, para ver si con el apoyo de los jugadores podían revertir la decisión de renunciar que ya había tomado el entrenador del equipo luego de la derrota ante Lanús, en La Bombonera.



Entonces, Palermo y el resto de los referentes del plantel de Boca le pidieron a Borghi que no se vaya, que siga y el técnico quedó en tomarse algunas horas antes de tomar la determinación, aunque ya no hay marcha atrás.



Casi una hora y media después Borghi habló con la prensa, en una conferencia en la que siempre dio a entender que el partido de este domingo ante Lanús fue su último en la entidad de la ribera aunque dejó una pequeña puerta abierta para la continuidad



"No estoy renunciado", dijo Borghi, quien tampoco quiso confirmar que el martes iba a estar dirigiendo al plantel en la práctica que se llevará a cabo en Casa Amarilla.



"No he hablado con nadie que me iba. Voy a ver que sale mañana en los medios para ver si me decisión de irme descomprime", agregó, en una frase que sorprendió.



"Quedamos muy lejos del primero y llevamos muchos partidos sin ganar de local, a veces el técnico, que somos los responsables, tenemos que tomar decisiones", dijo después, dejando claro que determinó.



"Mañana es mi día libre, va a ser un día de mierda, hay que ver si vale la pena si tener una vida así", sentenció, mientras realizaba prácticamente un monólogo pese a que la prensa le realizó algunas preguntas.



"La última decisión siempre es del entrenador pero no me gusta tomar decisiones después de los partidos porque entiendo que salimos muy calientes. Lo que me dijeron los jugadores habla bien de mí y de ellos", concluyó.