Mundo | 15-11-2010

Chávez más complicado por casos de corrupción



El empresario venezolano Walid Makled, apresado en Colombia por tráfico de drogas, apuntó contra el entorno del caudillo caribeño. Dijo que tuvo protección para escapar de la justicia venezolana y se vinculó con funcionarios oficialistas



El diario venezolano El Nacional asegura Makled se mantuvo oculto en una mansión de La Lagunita, bajo protección militar y desplazándose en vehículos con placas oficiales.

Desde la cárcel colombiana, y en la tercera entrevista con este medio, el polémico fugitivo cuenta cómo burló durante 20 meses una orden de captura internacional y reveló otros nombres de altas figuras del régimen chapista con quienes hizo negocios y pagó generosas sumas.

Makled indicó que entre las pruebas que planea consignar ante organismos federales está un pago millonario al general de Brigada Wilsson Marín Leal, un oficial que fue jefe de operaciones del Grupo de Transporte Presidencial. Este funcionario se encarga de pilotear los aviones en los que viaja el presidente Hugo Chávez. "Lo conocí a través de otro general que no lo quiero nombrar, y nos hicimos muy buenos amigos", reveló.

El pago fue una ayuda que Makled le otorgó a Marín para atender necesidades personales. A cambio, explicó, "puso a un mayor a trabajar conmigo. Lo tenía conmigo a la fecha del 2008″.

Dijo también que además del pago inicial, estableció con Marín un pago trimestral mínimo de 150 mil dólares, "dependiendo de cómo estuviera la situación". Los pagos se realizaban mediante diversos depósitos en distintas cuentas del general Marín, indicó Makled. "Las pruebas las tengo", agregó.

Estas nuevas revelaciones se suman a los negocios que habría realizado con el hermano del actual ministro venezolano de Interior y Justicia, Tareck El Aissami."Él (por el hermano de El Aissami) fue a mi casa, tengo videos por si se le ocurre negarlo. También tengo un voucher que certifica que le deposité (dinero para la campaña de Hugo Chávez)".

El capo narco admitió no haber hablado nunca con el funcionario venezolano, pero sí aseguró que su contacto fue solamente un intermediario entre él y El Aissami. "Él me decía que tenía que contarle (al funcionario)", señaló.

Bogotá aguarda un fallo de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), máximo tribunal judicial, para decidir si lo extradita hacia Caracas (ver nota relacionada).




Comentá esta nota: